“Una estrella que bendice y que pide reciprocidad para la comunidad y la tierra, Hacia la estrella de hielo, hacia el Qoyllorrity me dirijo yo, Lleva mi plegaria, mi voz, mi cantar, mi danzar. Me encuentro con mis hermanos de otras naciones para darle gracias por la vida. Ahora la vemos desparecer poco a poco. Sus aguas corren cada vez más aprisa y no sabemos qué hacer.”
La festividad del Señor de Qoyllorrity es una de las más grandes fiestas de origen y organización indígena en América latina. No se sabe exactamente en qué tiempo empezó a realizar pero al parecer se trata de una fiesta que ya se realizaba antes del imperio incaico. Esta fiesta es compuesta por muchos momentos. En primer lugar se trata de una gran peregrinación hacia el Santuario para rendir culto a los Apus, el Sol y sobre todo al agua y mantener en vigencia los vínculos comunitarios de cada pueblo. El culto está compuesto de un sincretismo religioso entre el Apu (El dios montaña, el nevado) y el Jesucristo Occidental, por ello el nombre está compuesto por Señor (palabra del español en referencia al Dios y Qoyllorrity, palabra quechua que significa estrella de Hielo en referencia al nevado). La estrategia de los devotos para que aquello sobreviva ha sido involucrar elementos de la colonización como la religión católica cristiana a través del sincretismo religioso.
Un testimonio textil de festividad indígena con responsabilidad cultural, social, comunitaria y ecológica.